Abrazados
en el silencio de la noche,
escuchamos
la música muy suave,
la luz tenue
susurra
en mi oído,
“Me siento muy sola,
y quiero que me ames
esta noche”…
Pegados
cuerpo a cuerpo,
siento las cosquillas,
cuando
colocas tu boca
en el lóbulo de mi oído,
y las piernas
entrelazas
con las mías...
Dulcemente
beso tu frente,
embelesado comienzo
a quita tu ropa,
gritas fuertemente:
“Siénteme, amor te necesito”...
Tu respirar
se vuelve muy profundamente
rozas mi piel,
y me empalagas con tus caricias
llenas de ternura
como la miel a sus abejas.
Pícaramente
sonríes...y dices:
“Tengo frio, me voy a dormir”,
yo fielmente
te sigo a tus pasos
hasta tu cama,
entregando el amor ,
disfrutando de tu ser
gimiendo:
“hazme vibrar, hazme sentir
en la oscuridad
de la noche”.
Y con frenesí,
saborear la miel
de las pasiones prohibidas
porque simplemente
me enamore de
ti,
te amo ...
Autor: Santos M.
González
Derechos reservados de autor
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